Embarcaciones recreativas privadas para el simulacro de rescate, material cedido por el Cabildo para el evento, helicóptero del Gobierno de Canarias, personal voluntario y de los servicios de alquiler de embarcaciones de la zona.
Todo eso, minutos después de la función, se esfumó. La embarcación a pasear a turistas, el helicóptero al aeropuerto, el material del Cabildo a su almacén fuera del municipio y los socorristas a alquilar motos acuáticas y a servir paellas y hamburguesas.
Lo único que se pudo ver genuinamente “municipal” fue lo de siempre. La tropa de políticos y representantes de diferentes instituciones para hacerse la foto típica del que todo va bien, que bonito es y qué bien lo hacemos todo. Imagen dantesca la de los “nuevos socorristas” haciendo un rescate con material cedido mientras detrás están manifestándose los socorristas y bomberos antiguos despedidos que todavía están pendientes de resolución judicial, entre otras cosas.
El famoso “majo y limpio” con el que tanto nos amenazaron cuando el conflicto empezó en Febrero de 2010, por fin se ha cumplido. Se han cepillado a 28 de los 40 trabajadores quedándose curiosamente los mejor apadrinados y los más mansos.
El caso de los socorristas es un claro ejemplo de objetivo cumplido. Ahora son menos de la mitad, cobran un 30% menos y trabajan (mínimo) un día más a la semana.
Todas estas reducciones entendemos que también repercutirán en el servicio que prestan.
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